El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informará el jueves sobre la variación del índice de precios al consumidor de diciembre y su acumulado en 2017 que, según cálculos privados, registró alzas del 2,5% y 24%, respectivamente.

De cumplirse el pronóstico privado, la suba de los precios minoristas en diciembre será la mayor del año pasado, impulsada por los aumentos en las tarifas de electricidad y gas y la medicina prepaga, coincidieron los analistas.

La consultora Ecolatina calculó que a nivel nacional diciembre registró una suba del 2,5%, por lo que 2017 cerró con un alza del 24%. “Para enero, los cálculos preliminares nos están arrojando un alza del 1,5%, por el efecto arrastre y el turismo, pero para febrero estimamos un piso del 2% por el aumento de las tarifas del transporte”, adelantaron a Télam fuentes de la consultora que maneja Lorenzo Sigaut Gravina.

Por su parte, el economista jefe de Elypsis, Gabriel Zelpo, calculó que 2017 cerró con una inflación del 24%, luego de registrar una suba de 2,6% en diciembre.

En tanto, según un sondeo de la consultora Orlando Ferreres & Asociados, sostuvo que el salto experimentado durante diciembre fue del 2,8% por lo que el año pasado cerró con un alza del 23,8%. “El capítulo de Vivienda tuvo una variación de 11,75% tras los aumentos de electricidad y de gas que promediaron variaciones cercanas al 40%, explicando de este modo 1,33 puntos porcentuales del aumento total de la inflación del mes”, señaló el informe de Ferreres.

Recalculando

Desde la CGT, el Instituto de Economía y Trabajo (ITE) estimó que en diciembre se registró una suba de 2,5% mensual, “la mayor del año”, lo que dejó al 2017 con un aumento del 27,1%. A comienzos del 2017, el Gobierno aspiraba a alcanzar una meta de inflación no mayor al 17% anual, la que se vio superada octubre.

Si bien ya en junio se apreciaba que ese valor no se podía alcanzar, el Ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne destacaba que el aumento de precios minoristas sería en el 2017, “la mitad que el del año pasado”, refiriéndose al 41% registrado en el 2016, en la Ciudad de Buenos Aires, y el Conurbano Bonaerense.

Pero la persistencia del fenómeno inflacionario llevó al Gobierno a recalibrar sus metas, y elevó al 15% la inflación máxima prevista para el 2018, desde su anterior objetivo que tenía un 12% como máximo. “En definitiva lo que hemos hecho es demorar un año la llegada a nuestro objetivo último de inflación que es el 5% del año 2019 al año 2020”.

El ministro precisó que para este año la meta “va a ser del 15%” y que se va a trabajar con un número específico y no por rangos. Para 2019 sería del 10% hasta llegar al 5 % en 2020, apuntó.

“El motivo del cambio obedece a que habiendo transcurrido dos años desde el anuncio de las metas anteriores, recordemos que fueron anunciadas en enero de 2016 en el medio del un lanzamiento de un programa económico muy comprensivo, con muchos cambios de precio relativos, y con mucha incertidumbre y volatilidad”, explicó.